Frases célebres de Julio César

Redactado por Bernardo Peña . Artículo revisado, actualizado y verificado por nuestro equipo de psicólogos por última vez el 18 mayo 2023.
frase "Veni, vidi, vici" de Julio César, que resume su éxito militar en la Galia.

Julio César (100-44 a.C.) fue un militar y político romano que llegó a la cúspide del poder. Son conocidas sus campañas militares en la Galia, Britania y Germania. Además, tas vencer en una guerra civil ostentó el máximo poder de la República Romana, por lo que, tras su muerte, se instauraría el Imperio Romano.

Parte de la élite romana sentía una mezcla de envidia y miedo por la fama y el éxito que cosechó Julio César y, sobre todo, por su poder político y militar. Por tanto, urdieron un complot para asesinarle, cosa que sucedió en el año 44 a.C. en pleno Senado de Roma.

Frases célebres de Julio César

Es excelente tener la fuerza de un gigante, pero es tiránico usarla como un gigante.

Vine, vi, vencí.

La suerte está echada.

Sin entrenamiento, no existe el conocimiento. Sin conocimiento, no existe la confianza. Sin confianza, la victoria no existe.

La experiencia es la maestra de todas las cosas.

Cuando los tambores de guerra hayan alcanzado su punto más crítico, la sangre hierva con odio y la mente esté totalmente cerrada, el líder no tendrá la necesidad de apoderarse de los derechos de los ciudadanos.

Por norma, los hombres se preocupan más de lo que no pueden ver que de lo que sí pueden.

Los cobardes agonizan muchas veces antes de morir. Los valientes ni se enteran de su muerte.

Nada es más fácil que censurar a los muertos.

Amo la traición, pero odio al traidor.

Nadie es tan valiente que no sea perturbado por algo inesperado.

La mujer de César debe estar por encima de cualquier sospecha.

Es más fácil encontrar hombres dispuestos a morir, que encontrar a los que están dispuestos a soportar el dolor con paciencia.

Nada es tan difícil que no pueda conseguir la fortaleza.

Estoy dispuesto a recurrir a lo que sea, a someterme a cualquier cosa, por el bien de todo el pueblo.

Lo que deseamos, lo creemos fácilmente, y lo que nosotros mismos pensamos, nos imaginamos que los demás también piensan.

Es mejor crear que aprender. La creación es la esencia de la vida.

Amo el nombre del honor, más de lo que temo a la muerte.

Es la ley de la guerra que los vencedores traten a los vencidos a su antojo.

En la guerra, los eventos de importancia son el resultado de causas triviales.

Déjame correr y lucharé con cosas que todos piensan que son imposibles.

Los hombres en algún punto son maestros de su destino.

Prefiero ser el primero en una aldea que el segundo en Roma.

Si tienes que infringir la ley, hazlo para tomar el poder, si no es el caso, observa la ley.

Es ley de guerra que los vencedores traten a los vencidos a su antojo.

Al final, es imposible no convertirse en lo que los demás creen que eres.

Es mejor sufrir una vez que estar en un sufrimiento perpetuo.

La diferencia entre una República y un Imperio es la lealtad del ejército.

Todos los hombres que reflexionan sobre los asuntos controversiales deberían ser libres de odio, amistad, ira y pena.

Hoy el enemigo habría ganado, si hubiera tenido un comandante que fuese un ganador.

La muerte, un final necesario, vendrá cuando venga.

No ha aprendido la lección de la vida, aquél que cada día no supera un miedo.

¿Pueden imaginar un sacrilegio más terrible, que el que nuestra amada república esté en las manos de unos dementes?

Vamos al sitio donde los dioses nos han mostrado el camino y la injusticia de nuestros enemigos nos llama.

Las grandes cosas deben realizarse sin dudar, así las posibles dificultades no serán capaces de detenerte.

Licenciado en Psicología por la Universidad de Jaén (2010). Máster en Análisis Funcional en Contextos Clínicos y de la Salud por la UAL (2011) y Máster en Psicología Jurídica y Forense por el COPAO, Granada (2012). Doctorando en Ciencias Humanas y Sociales por la Universidad Pontificia de Salamanca. Ha publicado 8 artículos científicos y es autor de los siguientes libros: «Psicopatología General», «Neurociencias: etiología del daño cerebral» y «Evaluación Psicológica». Además, es coautor del libro «Modelo ROA: Integración de la Teoría de Relaciones Objetales y la Teoría del Apego».